AL EXQUISITO RAPSODA... 48
REQUIESCAT.IN PACE
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(Historia de una catástrofe)
(J.Mª Gabriel y Galán)
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¡Vive el cielo,que me place,
glosar esa cacería,
en la que José María
derroche de ingenio hace:
gloso,pues,como os decía,
ese "Requiescat in pace."
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Al exquisito rapsoda
José María Terrones:
"el Sánchez" el autor poda
sólo por obvias razones.
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LLegó a mí esta joya inédita
de este modo tan extraño.
Estando en el Bar S. Remo,
como de costumbre,el sábado,
jugando con los amigos,
como siempre,al subastado.,
entre que arrastro de sota,
¡ay,si me llega el caballo¡,
esta vez no jugué bien
y doblé por eso el plato;
de nuevo,José María
se lo has regalado a Pablo...,
te voy a traer,me dijo
el último que he citado,
que igual que su bisabuelo
(el cazador del relato),
es un gran depredador,
un cazador consumado,
aunque éste,en vez de perdices
caza billetes de Banco...,
te voy a traer Faustino,
un poema que es fantástico.
Se lo dedicó el autor
a mi bisabuelo Acacio,
porque eran grandes amigos,
como podrás comprobarlo.
Enseguida me acordé
de tí y de hacerte un regalo:
de darte una fotocopia,
por si quieres recitarlo,
en el foro que prefieras
y en el momento adecuado.
Si eso,Terrones,decides
tendrás,también que avisarnos,
a Pablo y al que suscribe,
pues nos gustará escucharlo;
o a mí sólo,porque yo
le doy a Pablo el recado.
Esto es una sugerencia;
te lo doy para que tengas
este recuerdo tan grato
Sé que con placer lo aceptas,
igual que mi comentario,
que es estuche de esa joya
de la que arriba te hablo:
la fina sátira sobre
el cinegético fallo.
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b)
Cuando,al llegar a mi casa
he releído el poema
me he quedado deslumbrado;
me he quedado,de un a pieza,
más grande que el jabalí,
protagonista de esta
composición magistral.
¡Qué gracejo,qué destreza;
¡qué color,qué maestría
derrochó el autor en ella.
Deslumbrante está el maestro,
como yo,maestro de escuela,
de los pueblos salmantinos
y de tierras extremeñas.
¡Qué orgullo siento,al tener,
(salvo la distancia inmensa),
su profesión y algo de
de su inspiración poética¡.
Nunca Gabriel y Galán
me llegó tanto a la médula:
ninguna de sus poesías;
a excepción,quizás de aquella
que nos recitaste tú,
de una forma tan señera,
aquella tarde que fuiste
al Ateneo,¿te acuerdas?
Por cierto,José María:
es,cada vez más dispersa
mi asistencia a esa tertulia.
Se espacia más mi asistencia,
porque muy de tarde en tarde
se entusiasman mis orejas.
No soy mejor ni peor:
solo distinto de esa
manera de componer:
eso hace que cada vez
menos por allí aparezca.
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Oyendo en la Clerecía
tu voz,me dio por pensar,
que,juntos podemos dar
mucho de sí.Yo te oía,
pensando en que mi poesía,
si sale de tu garganta,
puede alcanzar gloria tanta,
que se nos quede pequeña
la ciudad.Tu voz se empeña...,
y obstáculos mil quebranta.
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DEL MISMO AL MISMO
Tengo treinta mil versos,yo séque interesantes,
o al menos,muchos de ellos,no quiero exagerar;
y sigo,como siempre,sin poder vislumbrar
una luz,tras el túnel.Ahora,después y antes
ha sido complicado,con los versos triunfar.
Soy consciente de ello; pero cuando constato
que hay miles de chorradas que sí han visto la luz,
se me hace más pesado cargar con esa cruz
de ver que es buscar fama,buscar tres pies al gato:
si me lo tomo en serio,peligra mi salud.
Si yo tuviera alguna motivación y viera
esa luz tras el túnel,que al principio cité,
muchas más y mejores estrofas escribiera<.
escribiría casi como siempre soñé.
Aún así brotan miles de versos con rotunda
rima: espotaneamente brotan del manantial.
En ellos,ni una sílaba hay colocada mal;
pero si una luz viera,iba a ser más fecunda
mi fuente y transparente mi agua como el cristal.
Tengo treinta mil versos que en miles de ocasiones
han sido compañeros del alma; pero no
me basta ya.Pudiera ser la voz de Terrones
el vehículo que hiciera compartir emociones.
¿Piensas,José María,tú lo mismo que yo?.
Los versos que recitas de ilustres consagrados
son mejores,sin duda; pero sabes también,
que el intrés que puedan tener los no editados,
los vivos,los calientes,los recién inventados,
se ve multiplicado,por lo menos por cien.
Te los ofrezco todos,para cuando los quieras,
para cuando oportunos pienses que puedan ser.
Si no tengo,sugieres el tema que prefieras,
y con esa materia que entonces me sugieras,
estoy seguro que otros versos van a nacer.
No soy especialista de versos por encargo:
cuando le viene en gana,viene la inspiración:
puedes estar seguro que lo intentaré con
mi ingenio,y si fallara,ya ves que sin embargo
no falla,en absoluto mi mejor intención.
Espero que no muera,como el pez por la boca:
ha sido el villancico mi bautismo feliz;
ese bautismo que ahora mi optimismo provoca:
Si luego,en el futuro,no diera yo en el quid,
la culpa la tendría mi imaginación loca.
Ha sido,como digo,la primera vez que hago
por encargo una estrofa; porque siempre escribí
sin retoques ni esfuerzos en el primer amago,
trasegúé,disfrutando el dulcísimo trago
del vino que te ofrezco,con ilusión a tí.
Tenemos una pega; :que no están muy de moda
mis versos,que,implacables,se clavan siempre en
el blanco de la rima; pero tú eres rapsoda,
capaz de echar por tierra zancadillas de quien
no es capaz de parirlos: no de parirlos bien.
Te cojo la palabra: tú has dicho que tenemos
que reivindicar rima; no sólo yo te oí:
te recuerdo que estaba también Isidro allí.
Yo te ofrezco mi barca; tú manejas los remos
y navegamos juntos.¿Quieres hacerlo?:dí.
Perdona que me ponga tan pesado.La olla
la tengo tan caliente,que se escapa el vapor.
Yo sé que me comprendes.Perdona,por favor:
es que comí de aquella hernandiana cebolla,
y por eso me he puesto hoy tan repetidor.
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" EL PUPAS"
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Todos los toros que hay sueltos,
con sus cornadas me aciertan:
si voy yo por la calzada,
me pilla una furgoneta;
y si voy correctamente,
como todos, por la acera...,
ya sé a quién le va a tocar,
si se suelta, cualquier teja.
¿ Se trata de operaciones?:
doce tengo en la cosecha.
Si una tienda de sombreros
hubiera tenido abierta,
hubieran venido hijos,
seguro que sin cabeza.
Si una bola se le cae
a Pascual, como a cualquiera...,
el juanete de Faustino
seguro que se la encuentra.
Ala mujer de Gregorio
puede que yo me parezca:
¿ a la orilla o al rincón?:
Póngase usted donde quiera:
porque le van a j...
a usted de cualquier manera:
por despiste, mala suerte,
por brujas o lo que sea.
Salamanca, día del Padre:
¡ si llega a ser de la suegra!
19 - 3 2019
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10 DÍAS DESPUÉS
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¡ Del golpe en el juanete te preocupas!.-
- Es que fueron intensos los dolores.
- Pues fueron caramelos de colores,
comparados con éstos que te chupas.
- Tendrás tú que mirarte con dos lupas...,
cuando salgas de casa: duele horrores,
pero esos episodios son peores,
por lo tontos: medita, amigo "Pupas".
Anda con pies de plomo, huevos pisa.
Antes cagarte que volver de prisa,
a casa, si te acosa un apretón.
Si quieres tú por fin estar ileso,
mira al suelo y no pienses más que en eso:
ni un paso sin andar con precisión.
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Salamanca 11 - 4 - 2019
A LAS DOS PAREJITAS
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SONETO
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Me alegro de que os toque la lotería:
si os hubiera tocado la de verdad,
hubiera sido una banalidad,
al lado de ver bien a Martín y Mía.
¡ Qué suerte habéis tenido como os decía!.
Muchas gracias a Dios, parejita, dad:
los dos habéis tenido capacidad
de lograr la pareja, ¡ qué puntería!.
También habéis logrado enmendar la plana
de vuestro tío, que entonces lo intentó en vano.
Lo intentó, pero todo quedó en la gana:
no quise ver a Pablo en todo el verano.
La vida es una tómbola, todos estamos
pendientes del destino...,y tirando vamos.
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LA VACA SUÏZA
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¡ Salve, torpe nodriza!:
el animal
más esencial;
sin tus enormes
mamas deformes,
lo pasaríamos
bastante mal.
¡ Cuánto misterio
tiene tu frente,
que siempre invita
a filosofar!;
tus ojos mansos
como la tierra,
inspiran tanta
quietud y paz,
que estoy seguro
de que Epicuro,
sacó lecciones
de tu mirar.
Vas siempre mansa,
lenta y solemne...,
como un desfile
procesional;
vas por los prados,
dando bocados,
sin más oficio
que el de llenar,
el rico fondo,
blando y fecundo
de tu blanquísimo
manantial.
Ser lento, torpe,
solemne y manso:
¡ cómo envidiamos
tu caminar!...,
en este siglo
en que enloquecidos,
vamos a tanta velocidad.
S. M. de las Cabezas,21 - 5 - 72
IDILIO EN LA HUERTA
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En la cumbre de un chopo sollozaba un jilguero:
su sollozo decía: - de tristeza me muero,
porque mi jilguerilla me ha negado su amor:
escuchaban las flores su cantar plañidero...,
y para consolarlo, le ofrecieron su olor.
Al llegar la delicia del perfume suäve,
hasta las amarillas naricillas del ave...,
su armoniosa elegía se volvió más sutil:
no sé asi fue el aroma o su pasión la clave,
o que la maravilla se realizó en abril .
Descendió el pajarillo y en la flor más hermosa
depositó su pico, que a la flor...,ruborosa,
hizo brillar de tierna y encendida pasión:
la volvió más ardiente, más gentil y olorosa,
el beso del jilguero de la triste canción.
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1968
Ligero gorrioncillo que enronqueces
con tus alegres cantos en la rama
de ese amado peral, que tantas veces,
nos sirvió, a mí de sombra, a tí de cama.
¡Cuánto a mí,gorrioncillo, te pareces!:
como mi voz, tu voz de amor se inflama;
como yo, que te acojan agradeces:
también tu voz al anfitrión aclama.
Sigue con tus gorjeos, que presiento
que seremos amigos algún día...,
ya que nos une el mismo sentimiento:
aunque de tu armoniosa melodía,
se distingue mi voz por el acento:
la canción que yo canto es más sombría.
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1968
Encinas, amigas viejas:
que escuchasteis tantas veces
mis cantares y mis quejas:
me habéis pagado con creces,
escuchando siempre mudas,
encinas pardas y rudas,
encinas, nidos y camas.
Ayer canté a vuestras ramas;
hoy canto a vuestros pilares:
dispensad a mis cantares
vuestra atención impasible:
encinas sobre los trigos,
verdi-amarillos testigos
de que sois inconmovibles.
Hoy les canto a vuestros troncos,
retorcidos, grises, broncos:
postes macizos de una
verdi-amarillenta cuna
de los jilguerillos roncos.
Tronco en el suelo metido
retorcido y musculoso:
puedes estar orgulloso;
nadie tu fuerza ha vencido:
que no es "el Titán blasfemo
ni el brazo de Polifemo
la mitad de poderoso
que tú, gris y sarmentoso
tronco en cuyo honor yo quemo
todo este incienso, gozoso.
Tu fuerza es ejemplo vivo,
aunque enterrado e inerte,
de que el poder del más fuerte
nunca ha de ser ofensivo.
Tú solo tu fuerza inmensa
contra los rudos hachazos
y para amar: ningún ser,
por muchos y grandes lazos
que le unan al ser querido...,
por mucho que a él esté unido,
da tan intensos abrazos,
como los que dan al suelo,
tus raíces: que le aman tanto...,
que sólo con mucho celo
y con no menos quebranto
se arrancan; y se ve entonces,
que esos sarmentosos bronces,
están húmedos de llanto.
S. Martín de las Cabezas,2 - 7 - 1972
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EL CERRO DEL SANTO a)
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A encontrar las palabras adecuadas no acierto
para poder cantarte, cerro pelado con
el amor que mereces, cerro seco y desierto...,
cerro destartalado como mi corazón.
Yo te cuento mis cuitas pues me siento tu amigo,
porque tenemos muchos parecidos los dos.
Cerro calvo, yo siempre me comparo contigo,
cuando piso tus cumbres, de las liebres en pos.
A veces me ha ocurrido que al saltar una liebre,
crzando velozmente tu ardiente desnudez...,
sudando yo a torrentes sudor casi de fiebre,
reseca la garganta, transido ya de sed...,
me ha sorprendido en medio de grises pensamientos,
de rosa para ella, pues les debe el vivir,
y me ha dado tal susto que mis nervios violentos
provocaron un mucho más intenso latir.
Luego corto los hilos que con ansia imprudente
ha tejido la araña de la memoria inquieta,
y siguiendo la máxima de vivir el presente,
otra vez bajo el hombro la impaciente escopeta,
el placer de la caza me domina creciente.
Solo el que haya vivido la febril impaciencia
de este deporte y sienta la febril afición,
comprenderá la dosis de ansiedad y paciencia
que se siente cazando, la brutal resistencia
al cansancio y la dosis de creciente pasión.
Yo, que siento con creces esas embriagadoras
sensaciones y a todas mi pasión las abraza,
borracho de emociones dedico varias horas,
hermosas y febriles, más tarde agotadoras,
a la noble y violenta sensación de la caza.
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1973
En la clase modesta tonde día tras día
sufro el lento martirio de la monotonía,
brotan mis florecillas de modesta poesía.
Ausente ya el bullicio sigo yo solitario,
desgranando las notas de este dulce rosario,
que me eleva del lastre de sentirme ordinario.
Frente a los ventanales hay un bello paisaje,
poblado de castaños de tupido ramaje:
me siento de la reina naturaleza el paje...,
y canto a mi señora y a su vestido verde:
mi canción en la brisa que me besa se pierde:
y allá al fondo un rebaño, sin cesar bala y muerde.
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1973
EL CERRO DE LOS HORNOS
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Ruedan los duros guijarros
que lanzan los ojeadores,
sobre los verdes chaparros.
Mis ojos, que, soñadores...,
estaban adormecidos,
fijos en el horizonte,
se posan, a estos ruidos
sobre las faldas del monte.
Mi mano nerviosa, inquieta,
veloz, ansiosa y feliz...
pone a punto la escopeta,
pues un astuta perdiz,
levantada por un perro,
viene hacia mí por un claro;
mas mi certero disparo
la impide llegar al cerro.
La lógica me aconseja
quedarme allí,porque pueden
venir más piezas, mas ceden
mis dudas, a quien no deja
la impaciencia ser sensatas,
y con ansia incontenida
saco a la perdiz herida
de entre las espesas matas.
3 - 2 - 1973
El sol claro y ardiente mis espaldas calcina;
refresca mis ardores la pequeña piscina...,
y un ruiseñor en tanto, que en cerezo trina,
me refresca la mente con su voz cantarina.
Agradece mi carne la delicia suave
del agua que a caricia gratísima me sabe
y entretanto mi mente, con los trinos del ave,
se imagina en el puerto como la frágil nave,
que se vio zarandeada por la furia del viento:
y venciendo sus ansias al empuje violento,
se libró de la furia del salvaje elemento...,
y se cambió su grito por un dulce lamento.
En torno todo grata paz y armonía alienta;
el trino del vigía que venció a la tormenta,
sigue con voz calmada, maravillosa y lenta,
refrescando mi ardiente mente calenturienta.
No frecuento
para mis viajes el Talgo:
que ese galgo,
brillante, veloz, macizo,
deshace siempre el hechizo
que yo siento,
viajando en un tren más lento;
pues tanta velocidad,
resta los restos de paz
que tiene mi pensamiento.
R´pido y cómodo tren,
viajando en tí me doy cuenta
que no hizo el destino bien,
no haciéndome nacer cien
años antes, yo prefiero
un tren de vida más lenta.
En vez de estruendo, armonía;
yo querría,
moderno coloso en vez,
de la loca rapidez
sobre tus placas de acero,
un lugar más placentero;
no es esta Edad la Edad mía;
mi poesía,
que rima porque jamás
ha tenido alternativa...,
es de hace un siglo, quizás,
mas como yo, ardiente, viva...
aunque siempre marcha atrás
o marchando a la deriva.
Si es en música, tampoco,
por lo visto estoy al día:
ante la pop, falta poco
para que me vuelva loco:
ese histerismo, a fe mía,
sólo sirve como droga:
y aunque hoy esté tan en boga,
ese histerismo me irrita,
aunque la virtud le admita,
pues si no injusto sería,
de que sirva de serrín,
a tanta mente vacía
de tanto calabacín.
Falla, que nunca me falla;
Vives, CHaecskosky, Turina...
o un ruiseñor cuando trina,
o un serrijón cuando calla.
Kraus, Luis Mariano, Negrete,
gayarre, Marcos Redondo...,:
¡ cómo vuestra voz se mete,
cómo se mette hasta el fondo!
También me calasteis hondo,
románticas y melosas
voces que en lengua española,
me provocais tanta ola
de nostalgias amorosas.
Voz de Iglesias, de Gardel,
de Nat, king koll, de Guardiola,
de Machín, de Gloria LASO,
de Adamo,, de Rafael,
de Mari Trini...,lo paso
como si comiera miel.
Ardiente y dulce sabor
de esas canciones de amor;
aunque avives mi dolor,
yo te seré siempre fiel.
El Talgo sigue su marcha
sin hacer
caso de mis reflexiones;
devora veloz la escarcha
que cayó al amanecer...
y como en más ocasiones
dejo, feliz de pensar
en mi sino,
pra ponerme a charlar,
con un tranquilo vecino
que acaba de despertar.
Junio de 1972
Faustino Hernández Arenas
faustinosanmartin@gmail.com
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